Lograr un desarrollo integral (cognitivo- socioemocional- físico-espiritual) en los niños y niñas, fortaleciendo sus potencialidades, fomentando hábitos y valores; reconociendo su grandeza cristiana en su entorno familiar y social.


Profesoras preescolar:

De pie: Mariella Elizondo Vargas, Zully Vargas Angulo, Laura Navarro Alfaro, Alexa Chacón Vega, Ligia Piedra Meléndez, Evelyn Serrano Oses, Montserrath Vargas Jiménez, Gabriela Jiménez Chaves.

Abajo: Andreina Chaverry Ruphuy, Yely Barahona Hernández, Tatiana Camareno González, Geanina Azofeifa Retana, Margot Rodríguez Porras.


VISIÓN

Nuestra visión va orientada al servicio evangelizador según los principios braderianos y franciscanos. Pretendemos ofrecer una educación cristiana con calidad humana y académica donde se vea al niño(a) como un ser global, brindando acompañamiento interdisciplinario y atendiendo las necesidades propias de cada individuo para crear un ambiente apropiado, para el óptimo fortalecimiento todas las áreas de desarrollo, pero sobre todo inculcando la base del Cristianismo: EL AMOR.

Contamos con una infraestructura adecuada a las necesidades propias de la población y un personal calificado, comprometido, que trabaja dignificando a cada niño(a) como seres únicos de la creación de Dios por  medio de una educación humanista.

MISIÓN

Ser una opción competitiva, estable y organizada, que ofrezca una educación integral, formando niños(as) con calidad humana, basada en valores cristianos, según los principios braderianos-franciscanos y con las herramientas necesarias para iniciar un exitoso proceso escolar.

CARISMA

El carisma del Espíritu Santo según sea dado, para fortalecer nuestra iglesia, mostrando a cada uno de los estudiantes que la única forma de vivir en gracia, es cumplir siempre la voluntad del Padre Celestial.

'Que cada cual ponga al servicio de los demás el carisma que ha recibido, como buenos administradores de las diversas gracias de Dios. Si alguno habla, sean palabras de Dios. Si alguno presta un servicio, hágalo en virtud del poder recibido de Dios; para que Dios sea glorificado en todo por Jesús Cristo, para quien es la gloria y el poder por los siglos de los siglos. Amén'': I P 4:10,11